martes, 20 de diciembre de 2016

Historia de una intermitencia



Corazones fundidos. Como bombillas que dejaron de alumbrar. Hermosa esclavitud. Encadenado a tus labios. Dependiendo de tu respiración. Hablando el idioma de los espejos. Los que muestran rostros opuestos. Dos universos mudos que se entienden con sólo el reflejo de sus ojos. Viajando más allá.
El arcoíris que enamora cada día a este lluvioso corazón. La única que llena de notas mi pentagrama, de música mi vida. Mi clave de sol. Mi única melodía.
Abandonado en el huérfano andén de tu estación. Donde no pasa ningún tren. Se me escurren tus miradas como el agua entre los dedos. Se dispersan como lágrimas en el mar. Estoy a un abrazo de derrumbarme. A un café de reencontrarme con la inspiración. A un par de copas de escribirte esta declaración. ¿Me invitas a un último ataque de pánico? A un intencionado aislamiento. A una eterna indecisión.  
Nuestros cerebros tirando de freno de mano. Días de autocrítica, de autodestrucción. Corazones derrapando. Cuerpos que intuyen la próxima colisión.
Sueños calientes en camas frías. Deseos llenos de esperanzas vacías. Historia de una intermitencia. Contrastes, memorias de dos suicidas.

 

domingo, 4 de diciembre de 2016

¿Saltamos?


Ya hemos llegado. Este es el puente. ¿Saltamos?

En realidad, yo ya lo hice. A tus espaldas. Sin tu permiso. Cuando me enamoré de ti. El día que te conocí.

Un suicida colgando de tus sueños. Corazones en suspensión. Por favor, no me sueltes.

Buscábamos abismos, nos perdíamos en laberintos. Se enamoraron nuestros demonios.

Que contigo aprendí que los sueños se hacen realidad. “Tan sólo, visualízalo”, me decías…

Océanos en llamas. Incendios que mojan. Naufragando entre hogueras. Quemando mareas.

Porque nunca me acuerdo de olvidarte. Porque se me derrite la coraza cada vez que te veo aparecer. Cada vez que te pienso. Y, la verdad, no sé hacer otra cosa.

La vida nos tiene reservado algo grande. Letras escritas a fuego lento. Juegos del azar en corazones de cristal.

Porque prometo esperarte abajo. Prometo cogerte y seguir volando. Juntos. Siempre sin gravedad. Siempre desafiando las leyes de la física. Siempre en nuestra nube.

Coge la maleta que vamos a llenarla de recuerdos. No llores, limpia tus ojos que vamos a llenarlos de momentos. De primeras veces. De principios sin finales.

Ya está. Ya hemos llegado. Este es el puente. ¿Lista para saltar?


Photo by Fariedesign